miércoles, 29 de julio de 2009

miércoles, 22 de julio de 2009

Su devocion no tiene fin. Experimenta un perverso conflicto entre el deseo de recordar y el deseo de olvidar. Parece sentir algo de placer en enfocarse en su perdida.

Asume que nunca nada cambiara y aun asi continua haciendose ilusiones, sabiendo que solo seran sueños. Sus pensamientos, entonces, son deliberadamente autodespreciativos y la llevan aun mas a ese sentimiento de perdida y lo unico que logra es herirse aun mas.


Comienza debil y cansada, se torna desconsolada y arrepentida antes de pasar a la histeria y, al final, a la locura.